Adiós al Impuesto País: cambios en el panorama económico argentino
A partir de este lunes 23 de diciembre, el Impuesto País dejará de estar vigente, marcando el final de un gravamen que se instauró en 2019. Esta decisión del Gobierno nacional busca reducir costos y facilitar el acceso a servicios y productos importados.
Impacto en los precios de servicios digitales
Con la eliminación del Impuesto País, los usuarios comenzarán a notar una disminución en los precios de servicios de streaming y plataformas digitales. Esto se traducirá en tarifas más accesibles para servicios como Netflix y Spotify, lo que permitirá a los consumidores disfrutar de estos servicios a un costo más bajo. Sin embargo, otros impuestos seguirán aplicándose, como el IVA y la percepción del Impuesto a las Ganancias.
Consecuencias para las importaciones
El fin del Impuesto País también tendrá repercusiones en las importaciones. Este gravamen había incrementado los costos de los bienes importados, y su eliminación se espera que facilite la llegada de productos desde el exterior a precios más competitivos. Esto podría contribuir a una moderación en la inflación, especialmente en los precios mayoristas.
Efectos fiscales y económicos
Aunque la eliminación del impuesto puede beneficiar a los consumidores al reducir costos, también representa una disminución en la recaudación fiscal. Este impuesto había generado una parte significativa de los ingresos del Estado. El Gobierno confía en que un crecimiento económico sostenido permitirá compensar esta pérdida de ingresos.
El fin del Impuesto País representa un cambio significativo en la política fiscal argentina. Si bien se espera que esta medida alivie la carga financiera sobre los consumidores y mejore el acceso a productos y servicios importados, también plantea desafíos para el equilibrio fiscal del Estado. Los próximos meses serán clave para evaluar el impacto real de esta decisión en la economía argentina.