José “Pepe” Mujica, el exguerrillero que trascendió fronteras y se convirtió en un referente de la izquierda latinoamericana con su discurso anticonsumista y su estilo de vida austero, falleció este martes a los 89 años. El actual presidente uruguayo, Yamandú Orsi, confirmó la noticia, sumiendo al país en un profundo pesar.
La salud de Mujica se había deteriorado en los últimos meses, tras revelarse a principios de 2025 que el cáncer de esófago, diagnosticado en mayo de 2024, se había extendido y su cuerpo ya no toleraba más tratamientos. “Con profundo dolor comunicamos que falleció nuestro compañero Pepe Mujica. Presidente, militante, referente y conductor. Te vamos a extrañar mucho viejo querido”, escribió Orsi en su cuenta de X.
Durante su mandato, entre 2010 y 2015, Mujica impulsó políticas progresistas que pusieron a Uruguay a la vanguardia en la región, como la legalización y comercialización de la marihuana, una primicia mundial en 2013, así como la legalización del aborto y el matrimonio igualitario.
Sin embargo, fue su estilo de vida alejado de todo protocolo, coherente con su prédica anticonsumista y su defensa del planeta, lo que catapultó su fama a nivel internacional. Su amor por el trabajo de campo y su pasión por la política marcaron su trayectoria.
José Alberto Mujica Cordano nació en Montevideo el 20 de mayo de 1935, descendiente de inmigrantes vascos e italianos. Tras la temprana muerte de su padre, fue criado por su madre, a quien describía como “una doña muy dura”. Desde joven, Mujica trabajó cultivando flores que vendía en mercados callejeros para ayudar a su familia.
Su militancia política comenzó en el conservador Partido Nacional, al que su familia estaba vinculada, pero en la década de 1960 se unió al Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros (MLN-T), una guerrilla inspirada en la revolución cubana que buscaba desmantelar el “Estado burgués” a través de acciones armadas.